La bañera es uno de los componentes del baño sin el cual muchos de nosotros no podríamos vivir. Dos de los materiales con los que puede estar fabricada la bañera son el acero y el hierro fundido. Aunque hay similitudes, las bañeras de acero y hierro fundido son tan diferentes como los metales utilizados para hacerlas. Cuando se elige entre los dos, hay que deliberar sobre factores como el costo, la durabilidad y la facilidad de instalación. Intentaremos informarte sobre las ventajas e inconvenientes de cada una para que puedas elegir entre una bañera de hierro fundido o de acero.
Las bañeras de acero pueden ser el estilo de bañera más práctico y asequible. Las bañeras de acero, también conocidas como porcelana sobre acero o esmalte de acero, se fabrican con una fina capa de acero estampado y recubierta con un esmalte de porcelana caliente. La superficie de estos baños es fácil de limpiar y mantiene su brillo durante un largo período de tiempo. También es resistente al ácido, la corrosión y la abrasión. Las bañeras de acero son ligeras comparadas con el hierro fundido y tienen el mismo tamaño que las bañeras de fibra de vidrio y acrílico, lo que las convierte en una buena opción para un baño renovado.
Una bañera de hierro fundido se hace vertiendo hierro líquido fundido en un molde para que el hierro se endurezca adoptando la forma de la bañera. Como las bañeras de acero, las bañeras de hierro fundido están recubiertas de esmalte. El hierro fundido es el material de baño más duradero, lo que significa que una bañera de hierro fundido te puede durar décadas. El esmaltado de una bañera de hierro fundido resistirá a la mayoría de los productos químicos, desconchados y a los arañazos. Las bañeras de hierro fundido suelen ser profundas, y el grosor del material ayuda a retener el calor del agua.
Aunque es mucho más ligera que el hierro fundido, la porcelana de las bañeras de acero pesa más que las de fibra de vidrio o acrílico, lo que las hace difíciles de manejar. La elección de formas y tamaños de las bañeras de acero es bastante limitada. Y si la capa de esmalte se desconcha o se agrieta, el acero subyacente se oxida. La capa de esmalte es gruesa y resistente, pero puede suceder.
Las bañeras de hierro fundido son extremadamente pesadas, y requieren un trabajo extra para instalarlas. El peso extremo de estos baños, combinado con el peso del agua, puede requerir un refuerzo adicional del suelo para soportarlo. Como el acero, el hierro fundido se oxida si el recubrimiento de esmalte se astilla o se agrieta. Debido a su durabilidad, una bañera de hierro fundido suele ser cara.