¿Te estas preguntando de qué material comprar la bañera? O ¿cual es el mejor material para la bañera? Pues leyendo la información que te traemos en este post deberías tener las cosas un poquito mas claras para tomar la decisión que más se adapte a tus intereses.
Rectangulares, ovaladas, asimétricas, de esquina, exentas, con sistema de hidromasaje… la bañera es el elemento central del cuarto de baño y elegir bien el material es algo importante, y sobre lo que hay que reflexionar, al menos un poquito antes de tomar la decisión final.
Aunque el acrílico sigue siendo el material más vendido estos días, existen otras opciones que van cogiendo su espacio en el mercado, y todos ellos, como es normal, con sus ventajas e inconvenientes. Vamos a darte algunas pistas para que tomes la decision correcta.
Además, no se cambia de bañera cada dos semanas… así que quizás sea una buena opción tomarte un poco de tiempo para leer algo sobre materiales y bañeras, y no arrepentirte luego.
Extremadamente robusto y pesado, el hierro fundido es el material tradicional para la fabricación de las bañeras. Desde el siglo XVIII utilizado para fabricar bañeras, y más tarde reemplazado por los materiales porcelánicos y acrílicos… aunque parece que vuelve a estar de moda. El hierro fundido vuelve a entrar en juego, y la verdad es que sigue teniendo sus buenas razones.
Ventajas:
La inercia de este material le permite conservar el calor mejor y más tiempo que otros materiales. Esto proporciona sin duda un mejor confort.
Es un material que disminuye o atenúa el ruido del agua.
Bien conservado es un material con una vida útil superior al resto. Muy resistente a golpes y rayaduras. Existen fabricantes que garantizan las bañeras de hierro fundido hasta 25 años.
Fácil de mantener y limpiar. Poco sensible a las bacterias, y la cal, este tipo de bañeras se limpian con mucha facilidad. Es fácil conseguir que la bañera este siempre en buen estado.
Reciclable. El hierro fundido al igual que el resto de metales se puede reciclar con facilidad, ya que no pierde sus propiedades en el proceso.
Inconvenientes:
Muy pesado. Hablamos de sus buenos 100 kilitos, o más, para una bañera normalita. Es, sin duda un inconveniente, porque la hace más difícil de transportar e instalar. Y además necesita ser colocada sobre una base resistente, que pueda soportar el peso (que aumenta considerablemente si esta llena de agua). No suele ser la mejor opción para un pequeño apartamento.
Si estas pensando en un baño retro o vintage, y te lo puedes permitir… este es tu material.
Más económico que el hierro fundido, y más ligero también, este material va comiéndole el terreno poco a poco a los acrílicos.
Ventajas:
Es más ligero que el hierro fundido, y por ello una bañera de este material sera más fácil de transportar y de instalar.
Es un material resistente que soporta bien los golpes y rayaduras.
Es muy higiénico. Con una superficie muy lisa, se limpia muy fácilmente con una simple esponja o paño húmedo.
Al igual que el hierro fundido, es un material reciclable.
Inconvenientes:
No conserva tanto el calor como el hierro fundido, no tanto por las propiedades del material, sino porque las bañeras de acero suelen ser de espesores muy pequeños.
Sonoridad. Suelen crear un pequeño efecto de resonancia que puede no gustar a ciertas personas, aunque existen tratamientos que pueden aplicarse para atenuar este efecto.
Un poco más frágil. Con el uso y el tiempo el esmaltado puede acabar por desconcharse, lo que hace que la bañera no luzca siempre perfecta.
Mas ligero que el hierro fundido, y mas sólido que los acrílicos… de momento no es una opción si quieres una bañera de gama baja. Es una buena opción si puedes invertir un poco de dinero y optar por un buen fabricante.
Muy usado hoy en día, el acrílico es un material termoformado, que requiere el uso de moldes para dar forma a la bañera. Tiene unas cuantas ventajas, y seguramente la más importante es el precio. Además del simple acrílico, existen en el mercado otras mezclas reforzadas que ofrecen una durabilidad un poco más interesante.
Ventajas:
Ligera. Es el un material que no pesa mucho. Fácil de transportar e instalar.
Higiénico. Fácil de limpiar. Con una esponja y un detergente suave bastará para dejarla impecable.
Agradable al contacto. El acrílico ofrece una superficie suave, lisa, antideslizante, y menos fría que los metales.
Económico. Mejor precio, más asequible que las otras bañeras.
Inconvenientes:
Poco resistente. Aunque resiste bien los golpes, este material se raya con facilidad si puede ser un poco delicado el uso de productos o detergentes un poco agresivos. Sin embargo un simple lijado y pulido puede servir para devolverle el esplendor inicial.
No reciclable. En su versión más básica es un material no reciclable, y con una vida útil inferior al resto, así que… esto debería ser sin duda un inconveniente.
Las variantes:
Resistencia, calidad y ligereza, tres ventajas y puntos fuertes de estos materiales nuevos de gama alta que pueden dividirse en dos familias.
Ventajas:
Muy agradable al tacto, suave e incluso un poco sedoso. Mantiene bien la temperatura del agua. Resistente y ecológico
Inconvenientes:
Precio elevado (aunque de muy buena calidad)
Materiales nuevos de alta gama compuestos por minerales naturales ligados con la resina. Muy de moda actualmente
Ventajas:
Fabricados con materias primas de buena calidad, son materiales muy resistentes. Soportan bien los impactos, rayaduras y el uso diario. Fácil de limpiar, agradable al tacto y antideslizante.
Inconvenientes:
Precio elevado (aunque de muy buena calidad)
Existen otros materiales que, aunque están fuera del circuito comercial en el que estamos acostumbrados a movernos, son aún una opción válida en función de las necesidades o gustos de cada familia.
este material tiene unas cualidades naturales magníficas. Aislamiento térmico, durabilidad, fácil de mantener, ecológico, etc. De hecho es la primera opción en países como japón o los países nórdicos, aportando calidez, confort y un espíritu zen al hogar.
Aunque sin duda no es la opción adecuada si vives en un apartamento o casa “normal”, las bañeras de piedra, mármol, son y siempre han sido una posibilidad.
Como en el caso del mármol no es una opción realista para la mayoría de las familias, pero no eso no quiere decir que no sea posible. Con esta opción puedes sin duda fabricarte la bañera de tus sueños.
