¿Te apetece disfrutar de un baño lleno de espuma y burbujas? ¿Y a quién no verdad?. Uno de los grandes placeres de la vida sin apenas gastarnos dinero y sin necesidad de usar productos químicos comerciales que puedan dañar nuestra salud, o el medio ambiente. Puedes hacer tu propio baño de burbujas usando simplemente unos pocos ingredientes que probablemente ya tienes en casa.
La ventaja de preparar tu misma tu baño de espuma es que puedes personalizarlo según tus preferencias y necesidades. Te damos un par de consejos para preparar un super baño de burbujas relajante y puedas disfrutar de un ratito de calma y relax bien merecido.
Sigue nuestros consejos, ya verás qué fácil y que bien te sienta
Consigue algún recipiente en el que puedas preparar la mezcla, un bol de cristal, o de plástico, o cualquier recipiente similar que tengas a mano.
Vierte unos 25 cl de jabon de castilla liquido en el recipiente de tu elección. Puedes elegir entre usar un jabón que ya esté perfumado o uno sin perfumar y añadirle posteriormente unas gotitas de aceite esencial más tarde para conseguir el aroma que prefieras. Si no tienes jabón de castilla, puedes comprarlo online, o usar otro tipo de jabón, simplemente presta atención al hecho de que no tenga componentes de origen animal y que esté hecho a base de aceite. Puedes usar champú para bebes, un poco de liquido lavavajillas que sea suave, o jabón líquido para el cuerpo.
Añade un par de cucharadas de glicerina vegetal y una cucharadita pequeña de azucar. Estos dos productos ayudarán a conseguir burbujas un poco más grandes y duraderas.
Puedes completar la mezcla con unas gotas de algún aceite esencial al gusto para hacer el baño más agradable y relajante. Las opciones son muchísimas: eucalipto, menta, té verde, lavanda, vainilla, limón… en fin, un pequeño toque al gusto para mejorar la experiencia.
Simplemente coge una cuchara o un tenedor y mezclalo todo bien pero suavemente, para que el jabón no empiece ya a formar la espuma y burbujas.
Utiliza un colador para pasar la mezcla a otro recipiente aque puedas cerrar, un bote de conservas, una botella de cristal o similar. Y déjalo reposar durante unas 24h. Si no vives sola quizás deberías pensar en ponerle una pequeña etiqueta a la botella para que nadie se confunda…
Dejalo reposar durante 24 h para que todo se integre bien. Si ves que la glicerina se va al fondo es un normal, es un poco mas pesada que el resto de los ingredientes. Bastará con agitar un poco el bote antes de usarlo.
Pon el tapón en la bañera y deja correr el agua. Pon una temperatura que consideres agradable. Evidentemente lo más agradable es agua templada o caliente, sin que queme.
Cuando haya un par de centímetros de agua en la bañera, añade entre 5 y 10 cl de la mezcla que has preparado. Vierte la mezcla debajo del chorro de agua que está llenando la bañera. Si estás usando el teléfono o alcachofa apunta en la dirección donde hayas puesto la mezcla.
Simplemente sigue llenando la bañera de agua caliente… pero sin pasarte. No la llenes del todo porque luego tienes que entrar tú… y si te has pasado desbordará.
Poco más que decir… no olvides poner un poco de buena música, apagar la luz y poner unas velas, coger tu libro favorito, o añadir unos pétalos de rosa en la bañera. Según tus gustos completa la experiencia. Las mejores cosas de la vida no cuestan demasiado. Disfruta del momento.
